11 Diciembres
Querida Fita, dos puntos Ojalá poder llegar a tu casa y escucharte decir: “Deja eso, que ese pinito está bien así…” Pero como dice Silvio: T odavía quedan restos de humedad Sus olores llenan ya mi soledad En la cama su silueta Se dibuja cual promesa De llenar el breve espacio en que no estás… La vida y los diciembres han seguido, como era de esperarse; sin embargo, Tú de alguna forma siempre estás presente, en los detalles, en las matitas, en el té y los guineitos, en tus cantantes favoritos (Todo el año aquí)… Recuerdo tu entusiasmo por la vida y sus cosas. Cierro los ojos y llego a la casa de piso amarillo y frente de madera pintada de blanco; atravesando la sala, salir por la puerta de la cocina al pasillo que iba directo al patio, el pilón para el café, plantitas de tomate, manzanilla, albahaca, orégano, sábila y florecitas, “el fregadero exterior” y una planta de auyama colgando por alguna pared. Es un viaje, por la casa, tu vida y mi niñez. H...